jueves, 16 de agosto de 2007

De las memorias.

Me gusta de vez en cuando escuchar las diferentes versiones de alguna canción.
Hoy precisamente que se cumplieron 30 años de la muerte de Elvis Presley, lo ví por primera vez actuar.
Mientras lo veía me acordé de la versión de los PSB, y que las comparo.

Elvis:



Los PSB:



Creo que eso del "Rey" es más un mote publicitario que quedó apañado para siempre por el mentado personaje.

A huevo, Sinatra es "el blu ais"
Edith Piaff era "el pequeño gorrión"
y ya más pacá tenemos al famoso "príncipe de la canción" o "el charro sexy".

En fin. Pasarán muchos años antes de que la gente deje de asociar lo de "rey" con Elvis.
Mientras tanto, que los Pet Shop boys sigan haciendo ruido como hasta hoy sin la consagración que da la muerte anticipada.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Dejando a los PSB que creí (y alguna vez dije) ni muerto me iban a encontrar oyéndolos.... qué cosa. Casi como ponerse a reflexionar sobre crustáceos reculantes permanentes (la inmortalidad de LOS cangrejos). Y que me acuerdo de esa "versión especial" de Pulp Fiction, ese trozo extra, que en un VHS era de fiaca total, porque había que adelantarle al caset y se gastaban las cabezas.
Ese trozo extra, digo, donde Uma Thurman entrevista a John Travolta para preguntarle por qué es fan de Elvis más que de los Beatles. Y aquel contesta: pues porque Elvis es el Rey. Punto.
Y recuerdo que la primera vez que oí a Elvis (oírlo en serio) fue en una película de David Lynch, de esas "deprimentes, la vida es una mi***a, y qué". Ese día fui a buscar un cedé de Elvis, lo compré (barato, en la Bodega de Aullará) y Vualá.
Después de gozarlo, pensé: lástima que este Elvis no pueda ser el Rey mientras exista José Alfredo. Porque ése sí.
Ora que en el Rock... mientras yo pueda poner igual a los Fab Four cantando, por ejemplo, Octopus' Garden, y a Elvis con, digamos, Suspicious Minds, peléense por el título de grandeza todo lo que quieran. Viva la Democracia Auditiva.

el7palabras dijo...

Pa empezar, hasta mis días 'nunca' tuve que "cambiarle las cabezas" a mi veachese o beta; y mira que le metíamos duro al cine en casa.
Puro chinche lobby que generaba productos alternos como los "limpiacabezas" "regresadoras" en múltiples formas y tamaños, etc.

Ya después, como dice usté y bien dicho, viva la democracia auditiva, porque tengo aquí a unos metros a un H chófer de micro para quien "el Rey" no puede ser otro que Vicente Fernández; y que si lo presionas un poco, no podría decidir si mejor vota por el mismísimo Antonio Aguilar.

Como dijo el campamochas -tú sabes quién es ese, cojones- "En esta vida nada es verdad ni mentira, todo depende del cristal con que se mira"

Un gran abrazo.